viernes, 19 de febrero de 2010

Zapatero, el turrión

El mando se refiere a las cualidades del general en cuanto a sabiduría, sinceridad, benevolencia, valentía y disciplina. Porque la guerra es un asunto de vital importancia para el Estado; una cuestión de vida o muerte; el camino para la supervivencia o la ruina.

En dialecto leonés existe el término turrión que bien podría definirse como “una persona obcecada hasta el infinito”. Les pondremos un ejemplo: en estos últimos días, con el temporal de agua y nieve que estamos sufriendo, un turrión bien podría decir que hace un día fantástico. Si usted insiste y trata de hacerle razonar, de explicarle que una temperatura de varios grados bajo cero no puede calificarse de calurosa, él se enrocará e insistirá en que la temperatura es muy agradable. Y para demostrárselo se pondrá el traje de baño, cogerá las gafas de sol y la toalla e incluso se irá al río y se bañará, aunque ello le suponga una pulmonía.
La actitud del Sr. Zapatero ha sido turriona desde el comienzo. Como si esto no pudiera pasarle a él, se negó durante prácticamente casi un año a admitir el estallido de la burbuja financiero-inmobiliaria, generadora de una crisis que se iba complicando cada día que él y sus responsables económicos no tomaban ninguna decisión; una vez admitida la crisis pensó que iba a ser cosa de unos meses, y se lanzó a una política de demanda –los 400 euros o el Plan E, que bien se podría haber denominado el Plan D de desperdicio- llevando a cabo un gasto público improductivo que disparó el déficit. Pero no había problema según el Presidente, ya que los ingresos de este 2010, ya en recuperación, iban a más que compensar los gastos de 2009; posteriormente presentó un Plan de Economía Sostenible que giraba alrededor de la innovación y las nuevas energías –no sabemos cómo habrá interpretado el Presidente la noticia de la nueva planta nuclear en Estados Unidos aprobada por Obama, el referente de nuestro gobierno ecologista-. De este Plan hace mucho que no sabemos nada, y a juzgar por los Presupuestos parece que nació muerto; y ahora, en que la situación es muy complicada –dramática si los mercados no se creen su discurso y reaccionan contra la deuda pública española- sigue empecinado en que la recuperación está a la vuelta de la esquina y no necesita a nadie más para definir la política económica, ya que la suya es la única correcta.
Como se puede apreciar, el problema del Presidente no es que esté equivocado, sino en que es incapaz de reconocer sus errores por turrión. A eso hay que sumar el corifeo de gobierno y de partido que ha organizado, en el que nadie le da la réplica, bien por falta de preparación o bien por evitar aquello que tan gráficamente describió Alfonso Guerra en su momento: el que se mueve no sale en la foto.
Pero lo que no comprende nuestro turrión Presidente es que la situación económica española es lo suficientemente delicada como para no poder mantener esa actitud. La solución de la gravísima crisis que atravesamos pasa, en primer lugar, por reconocer tanto su existencia como su profundidad para a continuación definir las medidas que se deben adoptar. Medidas que son conocidas por todos aquellos que tienen algunos conocimientos de economía: reformas estructurales y, muy especialmente, urge la modernización del mercado de trabajo, eliminando la dicotomía actual contratos fijos/temporales y permitiendo los ajustes vía precios (salarios) para justamente evitar los ajustes vía cantidades (paro); eliminación de las trabas burocráticas para la creación de empresas y posibilitar ayudas a los emprendedores; reorganización del sistema financiero, con la venta de aquellas entidades insolventes independientemente de criterios políticos y nacionalistas; reducción del gasto público con un control exhaustivo del que llevan a cabo las Comunidades Autónomas y los ayuntamientos. En definitiva, reconocer que sólo somos la cuarta potencia económica de la Unión Europea, que hemos gastado mucho más de lo que teníamos y que ahora nos toca apretarnos el cinturón. Se acabó la época de las sonrisas y ahora toca trabajar en serio.
Por cierto, y hablando de la Unión Europea, es muy importante recordar que el euro es una moneda sin Estado y, como ha señalado Jean Marie Colombani, "la zona euro es la moneda más el Pacto de Estabilidad; y la confianza en la moneda depende de que sus miembros respeten o no el Pacto" y, claro, es más que posible que nuestras cuentas públicas preocupen en Alemania y Francia; de esta forma nuestro turrión nacional podría encontrarse con la horma de su zapato en el mismo espacio en el que tanto le gusta fotografiarse: tras las medidas adoptadas por la UE con respecto a Grecia y sobre todo tras las amenazas implícitas y explícitas, no sería nada de extrañar que dentro de poco el triunvirato Trichet, Merkel, Sarkozy pusiera contra las cuerdas a nuestro gobierno y le obligase a tomar medidas que hasta ahora se ha negado a adoptar. Como se ha señalado en diversos foros el verdadero problema del Eurosistema y su moneda no es Grecia sino España. Y su credibilidad pasa, en esa medida, por la de nuestra economía.
Así, y gracias a esa actitud tan turriona, habríamos pasado de un gran pacto nacional a una imposición de nuestros socios europeos. Porque una cosa es clara: la economía española necesita crecer a un mínimo del 2% para generar empleo y todavía estamos en tasas negativas, muy endeudados y con un déficit descomunal. Nuestra economía está gravemente herida y alguien debe solucionarlo. Zapatero debe cejar en su obstinación y entender, como en la cita del general, que la situación es grave, que debe tomar decisiones inmediatamente y que de lo que haga depende el que sigamos la senda de la supervivencia o la ruina.

© José L. Calvo y José A. Martínez

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Genial,sencillamente genial, qué gran artículo.

Anónimo dijo...

lA ECONOMIA ESPAÑOLA HA PASADO DE NO TENER NECESIDAD DE FINANCIARSE EXTERIORMENTE EN 1996 A TENER UNA NECESIDAD DE FINANCIACIÓN EXTERIOR DEL 9,7% DEL PIB EN 2007.

Anónimo dijo...

El verdadero trade off de la economía en España:bricks versus brains.A ver, es cierto que entre 1996 y 2007 se ha crecido a una media anual del 3,5%;convendrán ustedes que nuestra economía no ha conocido época tan gloriosa desde, quizás el Plan de Estabilización del 59(1959,para los más jóvenes),ya que en esos años 1961-1973 se creció a un ritmo del 7% del PIB.Entonces, a mí se me ocurren tres cosas que explican el creciento de los noventa:1ª)la entrada masiva de inmigrantes desde 2002 aproximadamente.2ª)La entrada en la UEM(Unión Económica y Monetaria) desde 1994 y 3ª) y no menos importante,la impresionante bajada de los tipos de interés nominales a corto y largo plazo, desde un 13,3 y 11,7% respectivamente en 1992 a un 3 y a un 4,7%,respect. en 2005.Y,sin embargo, España este país que iba a dar lecciones de economía en una hora a todo el mundo(cómo gestionar unos PGE de forma sencilla)no supo aprovechar la oportunidad.Me explico:Finlandia e Irlanda que también tuvieron cierto éxito en la misma época que nosotros se dedicaron a priorizar el capital humano,la educación,la formación el desarrollo tecnológico,la investigación en vez de cemento y ladrillo que es lo que hicimos nosotros.
Firmado:Modigliani.

Anónimo dijo...

Bueno,Alemania es la propietaria de la deuda helena,Francia de una parte importante de la española,EEUU está dando los primeros pasos para retirar las medidas anticrisis y subir los tipos de interés.Tenemos que reaccionar ya.Para hacer creíble el compromiso de reducir el desequilibrio al 3% del PIB en 2013 hay que ponerse las pilas.¿Y qué tenemos?.Un desempleo de cerca del 19 por ciento,falta de competitividad internacional y un desaforado crecimiento de la deuda pública:17 puntos sobre el PIB en 3 años.El tío la vara.

Anónimo dijo...

Tuve la oportunidad (suerte) de conocer a los profesores Calvo y Martínez en unas jornaas sobre la crisis actual del sistema..., en Tenerife, y me quedé impresionado de su talla humana y profesional.
Mi humilde reconocimiento por el artículo. ¡Mi sentimiento de pesadumbre y cierto desespero por ver tomar un rumbo equivocado..!
Stc